- Por imitación: a los niños les gusta imitar lo que hacen sus padres. Lo ideal es comprar dos cepillos del mismo color e invitarlos a imitar a sus padres mientras se lavan los dientes
- Tú a mí, yo a ti: El niño va aprendiendo lo que significa lavarse los dientes pero los padres se aseguran que el lavado sea efectivo. Para esto hay que pedirle al niño que agarre el cepillo del adulto y lo mueva dentro de la boca, luego el adulto hace lo mismo con su cepillo y aprovecha de realizar una correcta limpieza
- Con un piso: dejar que se suban sobre un piso para que se puedan ver en el espejo. De esta manera tendrán más consciencia de lo que está realizando y pueden ver como se lavan los dientes
- Pasta de dientes para niños: si el niño tiene más de dos años se puede comenzar a utilizar pasta de dientes. Lo ideal es que ellos busquen la que más les guste en cuanto a sabor, color y dibujos