Yoga Prenatal

Babytuto

18 de octubre de 2019

En el embarazo la mujer ha de adaptarse a enormes cambios fisiológicos, hormonales y emocionales. Esta época se convierte en un periódo de descubrimiento interior.

La práctica del yoga ayuda a conseguir una mejor forma física y flexibilidad, pero sobre todo a conectar con el propio cuerpo. Es muy importante para aceptar y adaptarnos a los cambios que suceden y a mantener la conexión con el bebé, algo muy necesario durante los nueve meses y durante el parto. Te conecta con la sabiduría de tu cuerpo a través de la respiración consciente (pranayamas), posturas corporales (asanas), relajación consciente, concentración y meditación (dharana y dhyana).

En las últimas décadas las mujeres hemos perdido la confianza en nuestra habilidad para parir por el poco conocimiento que tenemos sobre nuestro cuerpo y sobre el proceso que se vive en el preparto, de ahí surgen los temores y la decisión de seguir los lineamientos que la medicina ortodoxa considera en ese momento. Con Yoga, el conocimiento e intuición en cada etapa en tu gestación, puedes retomar el poder y descubrir toda esa sabiduría que está impresa en cada célula de tu cuerpo.

En el plano físico, el yoga es muy completo ya que trabaja suavemente pero con profundidad tus músculos dándoles elasticidad, tonificando articulaciones, fortaleciendo el sistema nervioso, glandular y aliviando las molestias comunes por el cambio del eje de gravedad; También ayuda si hay cansancio, calambres, insomnio, hinchazón, dolor de piernas, etc.

En el plano emocional, la meditación, respiración y relajación facilitan la conexión con tu esencia y con el proceso que vives. Crea por lo tanto un vínculo y una comunicación con tu bebé desde que está en el vientre. Esto es muy importante para la futura relación con tu hij@ a través de las diferentes etapas de su crecimiento y desarrollo.

 La meditación promueve un estado que te lleva a relajarte física, emocional y mentalmente. El canto de Mantras o cantos sagrados te armonizan y sincronizan con tu bebé.

El embarazo es un momento muy importante en tu vida, comenzar a practicar yoga en ésta etapa es una buena opción para que vivas la experiencia de forma enriquecedora. Puedes practicarla desde el momento en que sabes que estás embarazada (a menos que tu médico por una razón especial lo contraindique: hipertensión, sangrado, parto prematuro anterior, problemas de corazón, etc.). De todas maneras Yoga se adecua a tu situación particular: si no has hecho ejercicio previo, en las primeras semanas lo que practicarás será la relajación, la meditación y las respiraciones. Mientras más tiempo te prepares mejor llegarás al parto. Si ya vienes haciendo cualquier tipo de ejercicios no tienes porque suspenderlo, a menos que sea algo riesgoso. Sólo hay que hacerlo suave y muy consciente para que el cuerpo te avise cuando algo molesta. En todo caso la yoga está adecuada a tu estado porque es un ejercicio que no lleva al cansancio extenuante y trabaja en todos los planos: físico, emocional, mental y espiritual.

Por supuesto que Yoga también ayuda a una mejor recuperación post-parto. La gestación es un gran esfuerzo para tu cuerpo, y estando ejercitado responde mejor. Mientras mejor condición física tengas mejor serán los resultados. En la parte emocional obtenemos herramientas como por ejemplo la relajación y respiración consciente para adaptarnos a los cambios que se viven durante la crianza y educación de l@s hij@s.

Andrea Rodríguez Feliú

Matrona y Doula

Instructora de Yoga Pre y PostNatal (AmarYoga)

Instructora de Casa Canguro

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