Sexo oral para los hombres

Babytuto

24 de septiembre de 2014

Como lo dije en uno de los artículos anteriores, el sexo oral, como práctica sexual es hoy integrante habitual del repertorio sexual de la mayoría de las personas. A diferencia de lo que ocurre con el sexo oral hacia la mujer, la práctica masculina es algo normalizado y altamente erotizado. La vez pasada invité a las mujeres a reflexionar respecto de las aprehensiones para gozar el sexo oral femenino, mientras que a sus parejas los invité a hacer de esta práctica un gratificante. Hoy quisiera invitarlos a reconocer todos los elementos que constituyen un buen sexo oral hacia un hombre, más allá de lo tradicionalmente otorgado y solicitado por ellos. Es frecuente que los hombres tiendan a considerar esta práctica como un momento único de placer exclusivo, sin más que hacer entregarse a las sensaciones percibidas. Sin embargo, son pocos los que se atreven a perfeccionar o potenciar la práctica. Es más, muchas veces son incapaces de verbalizar sus gustos. Tiendo a pensar que en este punto aparece el pudor masculino que frena la capacidad para explicitar o siquiera pensar en explorar sensaciones que excedan el básico contacto entre una boca y un pene. Es importante desmitificar esta práctica; remover el estereotipo promovido por el cine porno, y desligarlo de la idea de que es algo "prohibido" o "sucio". Al igual que sucede con el sexo oral femenino, la incorporación del contacto oral genital masculino, en la intimidad, implica aceptar al pene, testículos y perineo como parte de un todo que es el cuerpo “sensible y vivo”. Del mismo modo, quiero reivindicar el resto de la zona genital masculina como parte integrante y absolutamente receptiva del contacto oral. Muchos hombres se han perdido la infinita sensibilidad de esta última zona, debido al prejuicio de la homosexualidad asociada al ano. Gran equivocación. La zona perineal no tiene porqué ser amenazante, su estimulación, de hecho, potencia la erección ya lograda o por lograr. Saber entregar y recibir placer sexual no es una habilidad natural con que se nace, si no te tomas el tiempo para enseñarlo o aprenderlo, nunca disfrutarás de sus beneficios. Por otro lado, cada hombre es diferente y por ello no importa cuán bueno o malo fue alguien dando placer oral a una pareja sexual del pasado. La comunicación es muy importante para un sexo placentero, y para el sexo en general. No dudes en preguntarle a tu pareja si lo estás haciendo bien, si puedes mejorar o qué está faltando. Del mismo modo, no dejes de pedir lo que deseas, aunque sea un detalle fino pero tremendamente marcador de diferencia. Si lo que te frena para practicar esta modalidad de sexo es el temor de no oler apropiadamente, ello puede solucionarse invitando a tu pareja a tomar un baño compartido antes de meterse a la cama o bien usar algún aromatizador genital en base a fruta, chocolate o el sabor de tu agrado. Antes de algunas sugerencia prácticas, quiero recalcar que el sexo oral masculino puede ser practicado en diversas posiciones y no sólo tendiendo al hombre de espaldas. Puedes sentarlo en una silla, puedes ponerlo verticalmente sobre ti, a la altura de tu cuello, lo que te permite una mayor zona abarcativa, puedes estar cómodamente sentada con tus piernas abiertas y él de pie entre ellas, la idea, como en toda práctica sexual, es jugar a los cambios y las sorpresas, sin caer en rutinas. Algunas sugerencias para tener en cuenta:
  • Puedes comenzar desde la punta del glande, utilizando fundamentalmente tu lengua, la cual jugará un rato con el meato -abertura al centro del glande- y luego con el borde del glande, tirando hacia atrás suavemente de la piel.
  • Cuando vayas a introducir el pene en tu boca, forma una 'O' con los labios, ajustándolos al tronco y recórrelo.
  • Recuerda que el pene tiene dos caras. Dedica tiempo a cada una, lame primero a un lado y después al otro.
  • Puedes chupar, lamer, succionar y besar, pero nunca utilices tus dientes ni vayas a morder el pene ni los tésticulos. Juega con los ritmos, la cadencia, el movimiento que vas imprimiendo al pene y a tu lengua.
  • No olvides tus manos: sujeta, acaricia el bajo vientre y los testículos, o bien mueve de un lado a otro un pene ya vigoroso.
  • A muchos hombres les encanta observar la práctica. Si eres aún más osada, puedes dedicarle una mirada directa a sus ojos.
  • Por último, puedes jugar con tu lengua en sus testículos, de la misma forma que en la zona del perineo, donde puedes permitirte besos profundos y movimientos dinámicos de tu lengua.
  • Puedes permitir o no llegar hasta el final y que él eyacule en tu boca. Igual que puedes tragarlo o no, según te agrade o no su sabor.
En fin, cómo practiques el sexo oral será una elección única entre tú y tu pareja. La sensibilidad de cada cual determinará qué tipo de estimulación gustará y a cual responderán mejor. Sexo y mujer Renata Ortega - Terapeuta sexual y de pareja Centro Meridiano - Medicina china para la salud de la mujer www.centromeridiano.cl  sexo oral hombres

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