Esto puede afectar de alguna u otra manera a la mamá, quién se puede ver impacientada porque su hijo rechaza o se aleja de uno de los senos.Que los recién nacidos pasen por esta etapa es algo normal. Esto puede ocurrir debido a que existen diferencias entre ambos pezones, o que un pecho esté más hinchado que otro, o que simplemente para la mamá es un poco más difícil acomodar al bebé a uno u otro lado porque es zurda o diestra. También puede ser que el bebé tenga una dolencia y por eso le molesta estar en alguno de los lados (puede ser una infección de oído, o una vacuna), o que un pecho tenga menos leche que el otro. Algunas recomendaciones para intentar persuadir al bebé de que tome del pecho que menos le gusta:
- Ofrecérselo en primera instancia, especialmente cuando tiene hambre.
- Ofrecérselo cuando esté recién despertando. Como está un poco dormido, puede que no note bien la diferencia.
- Si el bebé se niega rotundamente a tomar de ese pecho, la mamá deberá extraerse la leche (para no tener mastitis), y ofrecérsela en una mamadera.
- Poner un poco de leche sobre el pezón, para estimularlo a través del olfato y el gusto.