La impaciente: Envidia poco sana
Babytuto
10 de septiembre de 2014
No pasa nada. Me he hecho todos los exámenes posibles y no pasa nada. En algún momento de mi vida creo que me diagnosticaron mal problemas a la tiroides y, por si acaso, me hice exámenes: nada. Ovulo bien y tengo reglas regulares. Lo único que pasa es que no me quedo embarazada. Lo "único".
Me cuesta decírselo a mis amigas cuando me preguntan. Es penca, es latero, es triste. La gente como que te compadece y eso es irritante. Y la gente que dice que todo va a estar bien también me resulta insoportable: yo no sé si todo va a estar bien, menos ellos, ¿cierto? Como que no tienen cómo salir ganando cuando me preguntan, y yo no puedo evitar la respuesta, no puedo cambiarles de tema, no puedo decirles que cuando en verdad quede embarazada se enterarán, no tendrán que preguntarme, porque poco menos que estaré con un cartel pegado en la frente.
No sé por qué a algunos les resulta tan fácil. No sé por qué a nosotros como pareja esto se nos ha vuelto cuesta arriba. Echo de menos un poco cómo éramos antes. Yo me he puesto algo más densa y ando pendiente de cada pequeña cosa. El Pelao, de alguna manera, se ha vuelto más despreocupado. Esto no es tan sorprendente como podría serlo. Cuando estamos en emergencias que me conciernen -yo chocando el auto, yo con fiebre y vómitos, etc.- el Pelao se ralentiza. Es como si pusiera mode on a la tranquilidad como contrapunto de mi stress/ desesperación/ poca capacidad resolutiva.
Creo que mi cuerpo me está jugando una mala pasada. Pocas veces he querido algo en mi vida con tantas ganas, pero también esto de quererlo tanto hace que me cuestione más cosas. Hace que nos mire, a mí y al Pelao, con más distancia. Y hace que yo no me sienta lo suficientemente buena.
Leo a las mamás destacadas y las envidio tanto. Envidio también a mis amigas embarazadas y a las que ya tienen guaguas. Las he visto cambiar. También quiero sentir que mi vida se vuelve más importante por alguien más. También quiero sentir esa entrega. Si hubiese un club compuesto por todas ellas, querría ser parte de ese club. Mientras tanto, espero.
La impaciente
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La impaciente: Envidia poco sana
Babytuto
10 de septiembre de 2014
No pasa nada. Me he hecho todos los exámenes posibles y no pasa nada. En algún momento de mi vida creo que me diagnosticaron mal problemas a la tiroides y, por si acaso, me hice exámenes: nada. Ovulo bien y tengo reglas regulares. Lo único que pasa es que no me quedo embarazada. Lo "único".
Me cuesta decírselo a mis amigas cuando me preguntan. Es penca, es latero, es triste. La gente como que te compadece y eso es irritante. Y la gente que dice que todo va a estar bien también me resulta insoportable: yo no sé si todo va a estar bien, menos ellos, ¿cierto? Como que no tienen cómo salir ganando cuando me preguntan, y yo no puedo evitar la respuesta, no puedo cambiarles de tema, no puedo decirles que cuando en verdad quede embarazada se enterarán, no tendrán que preguntarme, porque poco menos que estaré con un cartel pegado en la frente.
No sé por qué a algunos les resulta tan fácil. No sé por qué a nosotros como pareja esto se nos ha vuelto cuesta arriba. Echo de menos un poco cómo éramos antes. Yo me he puesto algo más densa y ando pendiente de cada pequeña cosa. El Pelao, de alguna manera, se ha vuelto más despreocupado. Esto no es tan sorprendente como podría serlo. Cuando estamos en emergencias que me conciernen -yo chocando el auto, yo con fiebre y vómitos, etc.- el Pelao se ralentiza. Es como si pusiera mode on a la tranquilidad como contrapunto de mi stress/ desesperación/ poca capacidad resolutiva.
Creo que mi cuerpo me está jugando una mala pasada. Pocas veces he querido algo en mi vida con tantas ganas, pero también esto de quererlo tanto hace que me cuestione más cosas. Hace que nos mire, a mí y al Pelao, con más distancia. Y hace que yo no me sienta lo suficientemente buena.
Leo a las mamás destacadas y las envidio tanto. Envidio también a mis amigas embarazadas y a las que ya tienen guaguas. Las he visto cambiar. También quiero sentir que mi vida se vuelve más importante por alguien más. También quiero sentir esa entrega. Si hubiese un club compuesto por todas ellas, querría ser parte de ese club. Mientras tanto, espero.
La impaciente
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