Honrar lo que somos en material sexual
Babytuto
26 de septiembre de 2014
Hace un tiempo fui invitada a una conferencia de un interesante expositor, quién ponía el acento de su intervención en la capacidad de “conexión” entre las personas. Muchos dirán, bueno, ¿pero eso qué tiene de novedoso?. Lo interesante estaba en el supuesto básico que sostenía la grandeza de dicha afirmación y que en simple tenía que ver con “la voluntad de honrar, con cada uno de tus actos, aquello que eres”.
Honrar lo que eres, pensé, tener conciencia de lo que puedes entregar y de lo que pueden los otros esperar de ti, resulta un maravilloso acto de humildad y a su vez de responsabilidad con uno mismo y, por sobre todo, con los otros.
Al salir, quedé motivada con sincero entusiasmo en relacionar esto con el ámbito sexual. ¡Que importante resulta saber quién eres eróticamente, así como tener conciencia de lo que quieres y puedes ofrecer sexualmente y por tanto de lo que tu amante puede esperar de ti!
Tuve la oportunidad de profundizar con el expositor algunas de mis reflexiones. Pude concluir que honrar lo que eres sexualmente en un momento determinado tiene relación con ser consciente del motivo que guía tu práctica sexual en el aquí y el ahora. Exsiten muchos motivos que incitan a la actividad sexual. Ser consciente de esos motivos, nosotros y nuestro/a amante, aporta a que el acto erótico adquiera la potencialidad de brindarnos plenitud y satisfacción, no sólo corporal sino también espiritual.
Me explico: cuando hablo de motivos, me refiero a aquello que guía nuestras ganas de tener sexo. Por ejemplo, puedo tener ganas de tener sexo para tener muchos orgasmos… o bien puede guiarme la idea de tener un encuentro muy romántico. Puedo desear tener relaciones sexuales para probar un juguete o unas cuantas nuevas posiciones del Kamasutra, o puedo querer tener sexo para reconciliarme con mi amado. Incluso puedo tener ganas de tener sexo sólo para no perder el ritmo semanal.
Cuando ambos amantes estén guiados por la pasión como motivo, probablemente, el ambiente estará repleto de intensidades, sensaciones, movimientos, sudores y humedades. Ambos se sentirán partícipes, involucrados, tomados en cuenta; una misma “motivación” un mismo ritmo. Al contrario cuando los amantes están relacionándose desde la ternura, probablemente el contexto sea más sutil, relajado, tranquilo, cariñoso. Sin embargo el resultado puede ser bastante similar: ambos se sentirán sintonizados. Pero ¿qué pasa cuando uno de los amantes está en la “pasión” y el otro sólo puede estar ese día motivado por la “ternura”? Y es más: ¿qué pasa cuando el motivo que guía mi actuar no es conocido o identificado por el otro? Probablemente habrá problemas.
Todas las motivaciones son valorables; no hay una mejor que otra, lo importante es que ambos amantes sepan qué juego se va a poner en marcha. Es decir, lo relevante es no generar ni generarse falsas expectativas de lo que conseguiré en cada encuentro sexual.
El sexo rutinario tiene sus beneficios y es una buena motivación cuando se está cansado y no existen energías para mayores innovaciones. El sexo exploratorio, en cambio, es un buen motivador cuando se está desarrollando una nueva práctica, cuando se está ávido/a de nuevas experiencias. El sexo juguetón no busca necesariamente lograr algo más que jugar, el foco no está puesto en lograr una excelente erección, una multiplicidad de orgasmos o una puesta en escena de película, lo que en cambio sí busca, probablemente, aquel amante que está motivado esa noche por lograr el mejor “desempeño”.
No tenemos sólo una motivación para relacionarnos, esta puede variar según cómo estemos, con quién estemos y qué deseamos encontrar en ese particular acto erótico. Las invito a observar en el próximo acto sexual cuál es la motivación que las guiará. Lo interesante de todo esto es la “conexión” con uno mismo y con el otro. En otras palabras ser conciente de tus potencialidades eróticas, de lo que puedes entregar: honra lo que eres como amante y enaltece tu entrega erótica.
Sexo y mujer
Renata Ortega - Terapeuta sexual y de pareja
Centro Meridiano - Medicina china para la salud de la mujer
www.centromeridiano.cl
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Honrar lo que somos en material sexual
Babytuto
26 de septiembre de 2014
Hace un tiempo fui invitada a una conferencia de un interesante expositor, quién ponía el acento de su intervención en la capacidad de “conexión” entre las personas. Muchos dirán, bueno, ¿pero eso qué tiene de novedoso?. Lo interesante estaba en el supuesto básico que sostenía la grandeza de dicha afirmación y que en simple tenía que ver con “la voluntad de honrar, con cada uno de tus actos, aquello que eres”.
Honrar lo que eres, pensé, tener conciencia de lo que puedes entregar y de lo que pueden los otros esperar de ti, resulta un maravilloso acto de humildad y a su vez de responsabilidad con uno mismo y, por sobre todo, con los otros.
Al salir, quedé motivada con sincero entusiasmo en relacionar esto con el ámbito sexual. ¡Que importante resulta saber quién eres eróticamente, así como tener conciencia de lo que quieres y puedes ofrecer sexualmente y por tanto de lo que tu amante puede esperar de ti!
Tuve la oportunidad de profundizar con el expositor algunas de mis reflexiones. Pude concluir que honrar lo que eres sexualmente en un momento determinado tiene relación con ser consciente del motivo que guía tu práctica sexual en el aquí y el ahora. Exsiten muchos motivos que incitan a la actividad sexual. Ser consciente de esos motivos, nosotros y nuestro/a amante, aporta a que el acto erótico adquiera la potencialidad de brindarnos plenitud y satisfacción, no sólo corporal sino también espiritual.
Me explico: cuando hablo de motivos, me refiero a aquello que guía nuestras ganas de tener sexo. Por ejemplo, puedo tener ganas de tener sexo para tener muchos orgasmos… o bien puede guiarme la idea de tener un encuentro muy romántico. Puedo desear tener relaciones sexuales para probar un juguete o unas cuantas nuevas posiciones del Kamasutra, o puedo querer tener sexo para reconciliarme con mi amado. Incluso puedo tener ganas de tener sexo sólo para no perder el ritmo semanal.
Cuando ambos amantes estén guiados por la pasión como motivo, probablemente, el ambiente estará repleto de intensidades, sensaciones, movimientos, sudores y humedades. Ambos se sentirán partícipes, involucrados, tomados en cuenta; una misma “motivación” un mismo ritmo. Al contrario cuando los amantes están relacionándose desde la ternura, probablemente el contexto sea más sutil, relajado, tranquilo, cariñoso. Sin embargo el resultado puede ser bastante similar: ambos se sentirán sintonizados. Pero ¿qué pasa cuando uno de los amantes está en la “pasión” y el otro sólo puede estar ese día motivado por la “ternura”? Y es más: ¿qué pasa cuando el motivo que guía mi actuar no es conocido o identificado por el otro? Probablemente habrá problemas.
Todas las motivaciones son valorables; no hay una mejor que otra, lo importante es que ambos amantes sepan qué juego se va a poner en marcha. Es decir, lo relevante es no generar ni generarse falsas expectativas de lo que conseguiré en cada encuentro sexual.
El sexo rutinario tiene sus beneficios y es una buena motivación cuando se está cansado y no existen energías para mayores innovaciones. El sexo exploratorio, en cambio, es un buen motivador cuando se está desarrollando una nueva práctica, cuando se está ávido/a de nuevas experiencias. El sexo juguetón no busca necesariamente lograr algo más que jugar, el foco no está puesto en lograr una excelente erección, una multiplicidad de orgasmos o una puesta en escena de película, lo que en cambio sí busca, probablemente, aquel amante que está motivado esa noche por lograr el mejor “desempeño”.
No tenemos sólo una motivación para relacionarnos, esta puede variar según cómo estemos, con quién estemos y qué deseamos encontrar en ese particular acto erótico. Las invito a observar en el próximo acto sexual cuál es la motivación que las guiará. Lo interesante de todo esto es la “conexión” con uno mismo y con el otro. En otras palabras ser conciente de tus potencialidades eróticas, de lo que puedes entregar: honra lo que eres como amante y enaltece tu entrega erótica.
Sexo y mujer
Renata Ortega - Terapeuta sexual y de pareja
Centro Meridiano - Medicina china para la salud de la mujer
www.centromeridiano.cl
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