La higiene y envases para la lactancia materna deben tener un tratamiento especial para evitar enfermedades y mal nutrición en los infantes. Este es un tema que puede cambiar de una cultura a otra, de un país a otro y de una región a otra. Sin embargo, en este artículo hemos reunido los protocolos generales que recomienda la Administración de Alimentos y Fármacos de los Estados Unidos (FDA) y los protocolos para la inocuidad de los alimentos de los bebés de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Conozcamos los envases más apropiados para la leche materna, las recomendaciones de higiene antes de almacenar la leche y las recomendaciones de almacenamiento.
Envases aptos para la leche materna
La leche materna puedes almacenarla en bolsas y contenedores especializadas para tal fin, tales como:
- En bolsas plásticas especializadas para el almacenamiento de la leche materna, son desechables y debes tirarlas una vez que las usas. Tienen un cierre tipo zip-loc a prueba de goteo que puedes llevar a donde vayas sin miedo a que se derrame.
- Vasos de almacenamiento especializados para leche materna, los hay de vidrio y de plástico. Vienen con tapa y sello seguro para transportar. Los puedes meter en el frigorífico o el congelador sin problema. También son aptos para lavavajillas y esterilizadores. Y muchos modelos se acoplan al cuello de las mamaderas para que no tengas que sacar la leche para otro envase.
- Frascos comunes para almacenar leche materna, se recomienda que los esterilices y solo los utilices para este fin y que te cerciores que las tapas de plástico sean seguras para tu bebé.
Recomendaciones de higiene antes de almacenar la leche
- La persona que va a manipular la leche y los utensilios debe lavarse las manos con agua y jabón y estar completamente limpia al momento de la manipulación.
- Las botellas y frascos de vidrio deben lavarse con agua y jabón antes de utilizarse. Una vez limpias deben colocárseles agua caliente. Las bolsas recolectoras de leche especializadas, ya vienen esterilizadas, por lo tanto, no es necesario lavarla ni hacerles nada más.
- Si las tapas de los frascos y botellas son de plástico es necesario cuidar que no tengan bisfenol A (BFA), ya que es sospechoso de ser dañino para los humanos. Un Informe de la Administración de Alimentos y Fármacos de los Estados Unidos ha creado una mayor consciencia de sus efectos en la exposición de alimentos para bebés y niños pequeños.
- Luego, los envases deben esterilizarse, lo puedes hacer de la siguiente manera:
- Una vez limpios los frascos los metes en agua hirviendo durante 5 minutos, los sacas con pinzas y dejas sacar al aire libre. Para este caso trata de tener una olla especialmente para la esterilización de los envases del bebé.
- Otra forma es que los esterilices con vapor de agua, puedes encontrar esterilizadores especializados para esto en tiendas de bebé.
Recomendaciones de almacenamiento de la leche materna
- Si la leche almacenada se va a utilizar en las próximas 24 horas puede guardarse en la nevera. Lo más aconsejable es que se guarde en la parte de atrás donde se conserva mejor el frío y no en la parte de adelante o en la puerta, ya que cada vez que se abre la puerta de la nevera la leche experimenta un oleaje de calor.
- La leche que se va a congelar es importante etiquetarla para saber su día de extracción y su tiempo de almacenamiento. Se recomienda almacenarla por un máximo de 6 meses. Mientras más rápido la congeles una vez extraída mejor conservación tendrá, ya que no disminuye la calidad de sus nutrientes.
- Es aconsejable guardar la cantidad justa que el bebé se va a tomar de leche, pues lo que deje no se debe guardar otra vez más allá de dos horas en el refrigerador.
- En caso de que desees mezclar leches de diferentes extracciones, se aconseja que estén a la misma temperatura, que la leche no la haya probado el bebé y que al menos sea del mismo día de extracción para que no haya problemas en la fecha que se va a rotular.
- Al momento de calentar las tomas nunca utilice el horno microondas, ya que, estos hornos no calientan de forma uniforme pudiendo producir bolsas calientes que queman al bebé. Prefiere sumergirlos en agua caliente por 15 minutos y remueve de vez en cuando para asegurarse del calentamiento uniforme.