Diferencia de edad entre hermanos

Babytuto

3 de junio de 2014

Hoy es mucho más común que las parejas planifiquen cuándo se quieren convertir en padres, y cuántos hijos quieren tener. Hay papás que prefieren tenerlos más seguidos, para que compartan más, y otros que se inclinan a que los niños tengan más diferencia, para ir disfrutando cada proceso de forma diferente. La diferencia de edad puede afectar de muchas maneras el funcionamiento de la familia, la labor de los padres, y la relación con el resto de los hermanos. Además, se deben tener en cuenta factores financieros, entre muchos otros detalles que influirán, y que puede presentar ventajas y desventajas para el grupo. Cuando los niños tienen una diferencia de 1 o 2 años es mucho más fácil para los papás que el hijo mayor acepte la llegada de su hermanito, y por lo tanto es menos probable que se produzcan celos. Pronto comienzan a jugar pronto y durante la primera etapa de crecimiento tendrán muchas oportunidades para realizar actividades en conjunto. Al mismo tiempo, este momento se puede tornar complicado para los padres, porque por la poca diferencia, ambos niños pueden ser muy demandantes. Lo más habitual es que las parejas decidan tener hijos con 3 o 4 años de diferencia, resolviendo ir por el segundo cuando el primero ya está un poquito más grande y es más independiente. Esto ayuda para que los papás se puedan concentrar mejor en el recién nacido, y durante la primera infancia los dos niños pueden ser compañeros de juegos. El inconveniente es que el hijo mayor puede sentir un poco de celos, y le puede ser difícil comprender la llegada de un nuevo hermano, e incluso comience a requerir más atención por esto mismo. Cuando la diferencia es más grande, sobre los 5 años, los papás pueden disfrutar con más tranquilidad la llegada del nuevo hijo, y el niño más grande entenderá mejor y con mayor facilidad el nacimiento de otro hermano. Lo malo es que puede que los menores sufran crisis de identidad, y en algunas ocasiones no tienen muchas cosas en común porque están viviendo etapas diferentes. A veces también pasa que los papás pierden un poco el ritmo de crianza, y se les hace difícil volver a educar a un nuevo hijo. Los tiempos que maneje cada familia son una decisión absolutamente personal, y todo proceso tiene tanto ventajas como desventajas, por eso no existe una resolución que sea más correcta que otra, sino lo que haga sentir a cada familia más cómoda. Otros temas que te podrían interesar: shutterstock_171853259.jpg>50.83333333333333:40

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