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Cuáles son los peligros de un golpe en la cabeza

Babytuto

3 de julio de 2014

Los golpes en la cabeza son un accidente que no debe dejar indiferente a los papás. Si bien en la mayoría de los casos no generan mayores problemas pues no son muy graves, hay otros que en apariencia parecen no serlo, pero detrás puede haber algún tipo de trastorno provocado por el incidente. ¿Qué repercusiones tiene un golpe en la cabeza? De acuerdo a un estudio realizado por el Nationwide Children’s Hospital en Ohio, Estados Unidos, los golpes en la cabeza pueden tener efectos muy diversos, los que se pueden manifestar de diversas formas a lo largo del tiempo. Estos pueden ir desde pérdida de memoria hasta problemas de atención, los que se pueden presentar hasta un año después de que el menor tuvo su accidente. Los resultados más graves están asociados con los niños que durante su accidente perdieron el conocimiento. Según la investigación, entre un 10 y un 15 % de los menores puede continuar con problemas cognitivos varios meses o hasta un año después de haber sufrido un golpe. ¿Cuándo se deben preocupar los papás? Un golpe en la cabeza de por sí genera preocupación en los papás, pero existen algunas situaciones que deben ser atendidas con más cuidado. Todos aquellos golpes que hayan ocurrido con mayor velocidad o aceleración generan más riego de peligro, así como la pérdida de conciencia del menor. En estas circunstancias, es fundamental que los papás lleven a su hijo a un centro asistencial donde pueda ser atendido, se le practiquen los exámenes de rutina para comprobar su estado interno, y luego determinar qué tratamiento debe seguir. Radiografías o un scáner puede servir para determinar la magnitud del daño, o si el menor está en buen estado. ¿Cómo se puede saber si el menor está bien? En un primer momento, el niño responderá a través del llanto, debido al dolor y el susto que provoca el accidente. Por eso, los papás primero deben esperar que se calme, para luego evaluar su estado. Una conducta anormal, somnolencia excesiva, vómitos, o irritabilidad deben ser motivos para consultar con un médico inmediatamente. Si no responde de manera habitual a ciertos estímulos, debe ser evaluado por un especialista, que tras practicarle algunos exámenes rutinarios podrá determinar qué es lo que le ocurre, y qué tratamiento debe seguir para ponerse bien nuevamente. Cuando los golpes implican caídas que puedan afectar otras partes del cuerpo, no es recomendable mover al niño de la posición en la que quedó, pues se podrían dañar otros órganos o partes del cuerpo. Lo mejor es llamar a una ambulancia que lleve al menor a un centro asistencial para que sea evaluado, y no hacerlo por los propios medios. En caso de que tenga una herida con sangre, se debe limpiar la zona con abundante agua, y esperar a que deje de brotar. Si eso no ocurre, lo más recomendable es tapar la herida con un paño limpio, o un trozo de gasa, y presionar para aminorar el sangrado. Luego, en un centro asistencial, podrán evaluar la magnitud y proceder según las necesidades del niño. Frente a cualquier duda lo mejor es siempre consultar con un especialista.   Otros temas que te podrían interesar: shutterstock_176341541.jpg>61.66666666666667:43.75

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