A partir de los 6 meses de edad, la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda iniciar la alimentación complementaria, siendo este uno de los hitos del desarrollo más esperado por muchos padres.

Con la llegada de las primeras comidas, empiezan a incorporarse nuevas rutinas y para ello es importante contar con las herramientas necesarias que te facilitarán este proceso. Uno de los artículos fundamentales en esta etapa es la silla de comer, la cual acompañará a tu hijo durante el desarrollo de su autonomía.

Aspectos a tomar en cuenta

En el mercado puedes encontrar una gran variedad de modelos y muchos visualmente pueden ser muy atractivos, pero debes tomar en cuenta que este artículo será de uso constante, por lo que lo más importante es que tu bebé se sienta cómodo y que además tenga la capacidad de adaptarse a tu estilo de vida.

·         Para las familias viajeras: en las familias donde las comidas fuera de casa son la preferencia, la silla de comer ideal son aquellas de tipo plegable, cuya principal su característica es que no tienen patas y pueden adaptarse a diferentes tipos de mesas.

·         Para espacios pequeños:  si tu hogar no cuenta con suficiente espacio libre para una silla de gran estructura, te recomendamos aquellas con función multi posición, las cuales puedan adaptarse a diferentes alturas y cuyo plegado sea fácil.

·         Para familias numerosas: en el caso que tengas más de un hijo la silla de comer es ideal aquella que se adapta al crecimiento de los niños, pudiendo ser usada en diferentes etapas.

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