¿Cómo ayudar a los niños que sienten rechazados por sus pares?
Babytuto
4 de mayo de 2016
Hoy en día los espacios sociales se transforman frecuentemente en entornos donde existe muchísima competencia, por lo hay una gran cantidad de niños que sienten rechazo de parte de sus compañeros de colegio o grupo de pares. Es usual en algunos casos escuchar afirmaciones o preguntas como: “Nadie me eligió para el equipo de educación física”, “¿Por qué mis compañeros no quieren jugar conmigo en los recreos”, “Un vecino celebró su cumpleaños, no sé porque invito a casi todos menos a mí”, entre otras.
Al igual que los adultos, los pequeños sienten la necesidad de pertenecer a los grupos de pares que los rodean, y que dentro de estos los valoren y los acepten por lo que son.
Ser aislado del grupo de pares puede ser sumamente doloroso para nuestros hijos, sobretodo porque en la gran mayoría de los casos no entienden la causa de esta actitud en sus pares. Por lo anterior, lo primero que debemos hacer es generar espacios de escucha y contención donde puedan sentirse cómodos para expresar lo que está sucediendo, sus sentimientos y las explicaciones que ellos se dan en torno a esto. Dentro de estos, es de suma importancia intentar identificar si existen conductas en ellos que puedan generar rechazo en los demás. Por ejemplo, conductas agresivas que puedan alejar a sus pares, actitudes dominantes hacia sus compañeros, reacciones de baja tolerancia a la frustración que son desproporcionales a hechos específicos, entre otras. En el caso de que estas se presenten, sugerimos enseñar a nuestros hijos mejores habilidades sociales para relacionarse con sus pares, procurando que estos no se sientan culpables por la situación. Así como en muchos problemas que puedan presentar los pequeños, el adulto es quien debe tomar el papel de guía y ayudarlo a que él resuelva el conflicto por sí mismo. Sugerimos no intervenir directamente, a menos que sea estrictamente necesario, dado que el niño sentirá que no es capaz de enfrentar estos hechos por sí mismo. Que el niño sepa que cuenta con el apoyo de sus padres es el primer paso para la solución del problema.
En la vida de cualquier ser humano existen contextos en los que puede surgir el rechazo y es de suma importancia enseñar a los más pequeños a enfrentar y manejar estas situaciones. Por lo anterior, tenemos que trabajar la resiliencia con ellos.
“La resiliencia es la capacidad de los humanos para sobreponerse a períodos de dolor emocional y situaciones adversas”. Cuando existe esta capacidad, en la mayoría de los casos, los niños aprenden a sobrellevar estas situaciones e incluso salir fortalecidos de estas, contando con más herramientas para enfrentarlas a futuro. Enseñarles además que, no todos merecen su amistad, dado que quien no vea lo valiosos que son como personas no debiera tener un espacio dentro de sus amigos. Siguiendo con esto, mostrarles que ellos si tienen muchas personas que los acogen y los quieren (tanto pares como adultos) y ellos son los que merecen su atención.
Cabe mencionar que la reacción de cada niño frente a sentirse marginado por sus pares va a depender de las características específicas que tenga cada cual, no obstante se hace imprescindible fortalecer su autoestima. Un niño con buena autoestima responderá de manera más asertiva frente a condiciones de este tipo y otras. Por esto, debemos validar sus emociones y características, animarlos a potenciar sus habilidades y manifestarles afecto abiertamente. Que los niños se sientan amados y respetados dentro de su familia, los ayudara a afrontar cualquier obstáculo que se les presente.
Si a pesar de las recomendaciones anteriores los problemas persisten, observándose un considerable sufrimiento en sus hijos, recomendamos que soliciten hora a ps.isidoradelsol@gmail.com o (+569) 42414737 para que en conjunto podamos contribuir a resolver esta dificultad.
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Babytuto
4 de mayo de 2016
Hoy en día los espacios sociales se transforman frecuentemente en entornos donde existe muchísima competencia, por lo hay una gran cantidad de niños que sienten rechazo de parte de sus compañeros de colegio o grupo de pares. Es usual en algunos casos escuchar afirmaciones o preguntas como: “Nadie me eligió para el equipo de educación física”, “¿Por qué mis compañeros no quieren jugar conmigo en los recreos”, “Un vecino celebró su cumpleaños, no sé porque invito a casi todos menos a mí”, entre otras.
Al igual que los adultos, los pequeños sienten la necesidad de pertenecer a los grupos de pares que los rodean, y que dentro de estos los valoren y los acepten por lo que son.
Ser aislado del grupo de pares puede ser sumamente doloroso para nuestros hijos, sobretodo porque en la gran mayoría de los casos no entienden la causa de esta actitud en sus pares. Por lo anterior, lo primero que debemos hacer es generar espacios de escucha y contención donde puedan sentirse cómodos para expresar lo que está sucediendo, sus sentimientos y las explicaciones que ellos se dan en torno a esto. Dentro de estos, es de suma importancia intentar identificar si existen conductas en ellos que puedan generar rechazo en los demás. Por ejemplo, conductas agresivas que puedan alejar a sus pares, actitudes dominantes hacia sus compañeros, reacciones de baja tolerancia a la frustración que son desproporcionales a hechos específicos, entre otras. En el caso de que estas se presenten, sugerimos enseñar a nuestros hijos mejores habilidades sociales para relacionarse con sus pares, procurando que estos no se sientan culpables por la situación. Así como en muchos problemas que puedan presentar los pequeños, el adulto es quien debe tomar el papel de guía y ayudarlo a que él resuelva el conflicto por sí mismo. Sugerimos no intervenir directamente, a menos que sea estrictamente necesario, dado que el niño sentirá que no es capaz de enfrentar estos hechos por sí mismo. Que el niño sepa que cuenta con el apoyo de sus padres es el primer paso para la solución del problema.
En la vida de cualquier ser humano existen contextos en los que puede surgir el rechazo y es de suma importancia enseñar a los más pequeños a enfrentar y manejar estas situaciones. Por lo anterior, tenemos que trabajar la resiliencia con ellos.
“La resiliencia es la capacidad de los humanos para sobreponerse a períodos de dolor emocional y situaciones adversas”. Cuando existe esta capacidad, en la mayoría de los casos, los niños aprenden a sobrellevar estas situaciones e incluso salir fortalecidos de estas, contando con más herramientas para enfrentarlas a futuro. Enseñarles además que, no todos merecen su amistad, dado que quien no vea lo valiosos que son como personas no debiera tener un espacio dentro de sus amigos. Siguiendo con esto, mostrarles que ellos si tienen muchas personas que los acogen y los quieren (tanto pares como adultos) y ellos son los que merecen su atención.
Cabe mencionar que la reacción de cada niño frente a sentirse marginado por sus pares va a depender de las características específicas que tenga cada cual, no obstante se hace imprescindible fortalecer su autoestima. Un niño con buena autoestima responderá de manera más asertiva frente a condiciones de este tipo y otras. Por esto, debemos validar sus emociones y características, animarlos a potenciar sus habilidades y manifestarles afecto abiertamente. Que los niños se sientan amados y respetados dentro de su familia, los ayudara a afrontar cualquier obstáculo que se les presente.
Si a pesar de las recomendaciones anteriores los problemas persisten, observándose un considerable sufrimiento en sus hijos, recomendamos que soliciten hora a ps.isidoradelsol@gmail.com o (+569) 42414737 para que en conjunto podamos contribuir a resolver esta dificultad.
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