¿Cómo estimular las matemáticas en los niños?
Babytuto
14 de mayo de 2015
Es sabido que durante los primeros años de vida los niños absorben como una esponja los estímulos que hay a su alrededor, por lo que es importante aprovechar de las instancias cotidianas para desarrollar los primeros cimientos que les permitirán entender la lógica y conceptos matemáticos de manera entretenida.
Los niños que comienzan el colegio con conocimientos sólidos sobre las matemáticas generalmente reflejan tener mayor facilidad a lo largo de su carrera escolar en esta área, por lo que es muy importante el estimularlos desde pequeñitos. La idea es que sea en la vida cotidiana, con sus juguetes, en el momento del baño, cocinando etc.
¿Cómo podemos comenzar?
Cuando son pequeñitos (de cero a dos años), lo ideal es que exploren los diferentes objetos u elementos que hay a su alrededor, tocándolos, metiéndoselos a la boca, jugando, conociendo las diferentes formas, colores, texturas, sabores, tamaños, etc.
Una vez que los niños ya tienen idea de la existencia de los elementos concretos, nos centraremos en ir integrando los siguientes puntos (a partir de tres objetos de uso cotidiano):
-Clasificación. Esto se refiere a agrupar cosas que tengan características en común, (por ejemplo: por color, tamaño o forma).
Podemos trabajar la clasificación a través del siguiente ejercicio tipo:
Presentándoles una fuente con frutas y pedirles que nos pasen las tres que son de color rojo, amarillo, redondas o chiquititas. (Esta misma actividad puede ser realizada con juguetes, lápices, servicios de mesa, o lo que se nos ocurra).
- Seriación. Esto se refiere a ordenar de mayor a menor y viceversa.
Podemos trabajar la seriación a través del siguiente ejercicio tipo:
Mostrándoles tres lápices de diferentes tamaños y pedirles que los ordenen del hermano mayor al menor, y viceversa. (También podemos trabajarlo con tres elementos cualquiera de diferentes tamaños).
- Comparación. Esto se refiere a tener conciencia en qué se parecen o diferencian dos elementos, y también a darse cuenta en dónde hay más o menos elementos.
Podemos trabajar la comparación a través de los siguientes ejercicios tipo:
Invitándolos a que nos expliquen en qué se parecen dos muñecas (con el objetivo de que nos respondan: las dos tienen pelo, las dos tienen brazos, etc.) Para luego decirles: ¿qué tienen diferente? (con el objetivo de que nos respondan: qué una tiene el pelo café y la otra lo tiene amarillo, etc.)
También, podemos mostrarles dos cajas de fósforos, una con muchos y otra con pocos, y preguntarles: ¿en qué caja hay más fósforos? o ¿en qué caja hay menos fósforos?
¿Cómo trabajar el vocabulario matemático?
Es importante que desde el comienzo utilicemos variados sinónimos para las palabras comunes de las operaciones aritméticas básicas (sumar, restar, multiplicar y dividir), de manera que sean familiares al momento de verse enfrentados en un futuro con la resolución de problemas.
Por ejemplo:
En vez de decir sumar también podemos ocupar palabras como: agregar, aumentar o poner.
En vez de decir restar también podemos ocupar palabras como: quitar, botar o sacar.
En vez de decir dividir también podemos ocupar palabras como: repartir o distribuir.
¿Qué otras actividades cotidianas podemos realizar en el hogar?
- Recordar acciones diarias. Reforcemos la memoria sobre las cosas que hicieron durante el día, de principio a final, y viceversa.
- Ayudar a poner la mesa. Planifiquemos y distribuyamos la cantidad necesaria de cubiertos que necesitaremos para cada puesto.
- Repartir las cartas de los naipes. Cuando juguemos con las cartas pidámosles que nos ayuden a repartirlas a cada persona.
- Participar en la organización de su propio cumpleaños. Esta labor es ideal ya que normalmente es realizada por los padres. Cuando los niños cooperan, aunque estén en edad preescolar, se desarrollan estrategias de organización y planificación, que los llevarán a un pensamiento más complejo y profundo. Aquí los pequeños tendrán que responder a las siguientes interrogantes: ¿a cuántos niños voy invitar?, ¿cuántas sorpresas y gorritos debemos tener?, ¿a qué hora llegarán y se irán los invitados?
- Jugar con los dígitos de las patentes. Mientras andemos en auto divirtámonos sumando los dígitos de las patentes, ordenarlos de menor a mayor, o viceversa.
- Recetas de cocina. Realicemos en conjunto alguna receta de cocina, en donde ellos sean quienes tomen las medidas de los ingredientes y sigan las instrucciones paso a paso.
- Hacer las compras al supermercado. Es una excelente idea que nos ayuden organizando cada elemento en grupos (por ejemplo: las verduras a un lado del carro, las golosinas a otro, etc.), y las cantidades que se necesitarán.
¡ A comenzar con la estimulación de las matemáticas!
Otros temas que te podrían interesar:
Compartir
¿Cómo estimular las matemáticas en los niños?
Babytuto
14 de mayo de 2015
Es sabido que durante los primeros años de vida los niños absorben como una esponja los estímulos que hay a su alrededor, por lo que es importante aprovechar de las instancias cotidianas para desarrollar los primeros cimientos que les permitirán entender la lógica y conceptos matemáticos de manera entretenida.
Los niños que comienzan el colegio con conocimientos sólidos sobre las matemáticas generalmente reflejan tener mayor facilidad a lo largo de su carrera escolar en esta área, por lo que es muy importante el estimularlos desde pequeñitos. La idea es que sea en la vida cotidiana, con sus juguetes, en el momento del baño, cocinando etc.
¿Cómo podemos comenzar?
Cuando son pequeñitos (de cero a dos años), lo ideal es que exploren los diferentes objetos u elementos que hay a su alrededor, tocándolos, metiéndoselos a la boca, jugando, conociendo las diferentes formas, colores, texturas, sabores, tamaños, etc.
Una vez que los niños ya tienen idea de la existencia de los elementos concretos, nos centraremos en ir integrando los siguientes puntos (a partir de tres objetos de uso cotidiano):
-Clasificación. Esto se refiere a agrupar cosas que tengan características en común, (por ejemplo: por color, tamaño o forma).
Podemos trabajar la clasificación a través del siguiente ejercicio tipo:
Presentándoles una fuente con frutas y pedirles que nos pasen las tres que son de color rojo, amarillo, redondas o chiquititas. (Esta misma actividad puede ser realizada con juguetes, lápices, servicios de mesa, o lo que se nos ocurra).
- Seriación. Esto se refiere a ordenar de mayor a menor y viceversa.
Podemos trabajar la seriación a través del siguiente ejercicio tipo:
Mostrándoles tres lápices de diferentes tamaños y pedirles que los ordenen del hermano mayor al menor, y viceversa. (También podemos trabajarlo con tres elementos cualquiera de diferentes tamaños).
- Comparación. Esto se refiere a tener conciencia en qué se parecen o diferencian dos elementos, y también a darse cuenta en dónde hay más o menos elementos.
Podemos trabajar la comparación a través de los siguientes ejercicios tipo:
Invitándolos a que nos expliquen en qué se parecen dos muñecas (con el objetivo de que nos respondan: las dos tienen pelo, las dos tienen brazos, etc.) Para luego decirles: ¿qué tienen diferente? (con el objetivo de que nos respondan: qué una tiene el pelo café y la otra lo tiene amarillo, etc.)
También, podemos mostrarles dos cajas de fósforos, una con muchos y otra con pocos, y preguntarles: ¿en qué caja hay más fósforos? o ¿en qué caja hay menos fósforos?
¿Cómo trabajar el vocabulario matemático?
Es importante que desde el comienzo utilicemos variados sinónimos para las palabras comunes de las operaciones aritméticas básicas (sumar, restar, multiplicar y dividir), de manera que sean familiares al momento de verse enfrentados en un futuro con la resolución de problemas.
Por ejemplo:
En vez de decir sumar también podemos ocupar palabras como: agregar, aumentar o poner.
En vez de decir restar también podemos ocupar palabras como: quitar, botar o sacar.
En vez de decir dividir también podemos ocupar palabras como: repartir o distribuir.
¿Qué otras actividades cotidianas podemos realizar en el hogar?
- Recordar acciones diarias. Reforcemos la memoria sobre las cosas que hicieron durante el día, de principio a final, y viceversa.
- Ayudar a poner la mesa. Planifiquemos y distribuyamos la cantidad necesaria de cubiertos que necesitaremos para cada puesto.
- Repartir las cartas de los naipes. Cuando juguemos con las cartas pidámosles que nos ayuden a repartirlas a cada persona.
- Participar en la organización de su propio cumpleaños. Esta labor es ideal ya que normalmente es realizada por los padres. Cuando los niños cooperan, aunque estén en edad preescolar, se desarrollan estrategias de organización y planificación, que los llevarán a un pensamiento más complejo y profundo. Aquí los pequeños tendrán que responder a las siguientes interrogantes: ¿a cuántos niños voy invitar?, ¿cuántas sorpresas y gorritos debemos tener?, ¿a qué hora llegarán y se irán los invitados?
- Jugar con los dígitos de las patentes. Mientras andemos en auto divirtámonos sumando los dígitos de las patentes, ordenarlos de menor a mayor, o viceversa.
- Recetas de cocina. Realicemos en conjunto alguna receta de cocina, en donde ellos sean quienes tomen las medidas de los ingredientes y sigan las instrucciones paso a paso.
- Hacer las compras al supermercado. Es una excelente idea que nos ayuden organizando cada elemento en grupos (por ejemplo: las verduras a un lado del carro, las golosinas a otro, etc.), y las cantidades que se necesitarán.
¡ A comenzar con la estimulación de las matemáticas!
Otros temas que te podrían interesar:
Compartir