Cómo estimular la motricidad fina en los niños
Babytuto
26 de junio de 2014
Generalmente, debido a las actividades diarias de los niños, no les cuesta tanto esfuerzo desarrollar su motricidad gruesa.
Por el contrario, la motricidad fina se basa en el desarrollo de los movimientos de las manos, dedos, e incluso muñecas, y puede que cueste un poco más fomentarla si no se estimula apropiadamente.
En un comienzo es esperable que los niños tengan algunas dificultades realizando nuevos movimientos, pero con el estímulo y apoyo los papás o cuidadores, pueden superar estas frustraciones y fomentar nuevas habilidades importantes para su desarrollo.
Algunas actividades para realizar junto a los niños:
- Vestirse y desvestirse: generalmente los niños aman ponerse o quitarse la ropa, por lo que es una actividad que podrán disfrutar al mismo tiempo que aprenden. Los papás incluso pueden dejarle escoger lo que se quiere poner, para darle un poco más de independencia y seguridad cuando tome decisiones.
- Llenar y vaciar: de seguro le será más fácil vaciar que llenar un recipiente con sus juguetes favoritos u otros objetos, lo importante es que vaya desarrollando su paciencia junto con sus habilidades.
- Dibujar: durante los 12 y los 18 meses los niños disfrutan mucho de esta actividad. Si bien les cuesta mucho trabajo dibujar figuras que tengan alguna forma, a través de sus garabatos poco a poco irán teniendo un mejor manejo del lápiz para aprender a realizar dibujos con más sentido.
- Apilar, separar y encajar: estas habilidades se adquieren de juegos de puzzles o cubos, y son actividades que disfrutan mucho los niños entre los 12 meses y los 3 años. Los hay de muchos tipos, lo que entrega muchas posibilidades de diversión y aprendizaje.
- Actividades sensoriales de tacto: a los niños les fascina descubrir el mundo que los rodea a través de sus sentidos, por lo que las tareas que involucren un tacto agradable y divertido les proporcionaran mucha información sensorial, además de ayudarles a desarrollar su fuerza y agilidad.
- Patear una pelota a un arco: los pies también son una parte del cuerpo que necesita desarrollo de la motricidad fina. Patear la pelota dentro de un arco puede ayudar a los niños a incrementar sus habilidades, fortalecer sus músculos y mejorar su agilidad.
- Exprimir esponjas o trapos mojados: este tipo de actividades ayudan a fortalecer los músculos de las manos, fundamentales para la motricidad fina. Lo mejor es que este tipo de tareas se pueden acompañar con deberes, lo que sirve para incrementar su confianza.
Si bien todos los niños tienen un desarrollo distinto, y algunos tardan más que otros en adquirir ciertas habilidades, siempre es bueno consultar con un especialista si el niño tiene alguna especie de retraso en actividades que ya debería realizar a su edad de acuerdo a su desarrollo psicomotor, pues detrás puede haber algún tipo de trastorno.
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Cómo estimular la motricidad fina en los niños
Babytuto
26 de junio de 2014
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Por el contrario, la motricidad fina se basa en el desarrollo de los movimientos de las manos, dedos, e incluso muñecas, y puede que cueste un poco más fomentarla si no se estimula apropiadamente.
En un comienzo es esperable que los niños tengan algunas dificultades realizando nuevos movimientos, pero con el estímulo y apoyo los papás o cuidadores, pueden superar estas frustraciones y fomentar nuevas habilidades importantes para su desarrollo.
Algunas actividades para realizar junto a los niños:
- Vestirse y desvestirse: generalmente los niños aman ponerse o quitarse la ropa, por lo que es una actividad que podrán disfrutar al mismo tiempo que aprenden. Los papás incluso pueden dejarle escoger lo que se quiere poner, para darle un poco más de independencia y seguridad cuando tome decisiones.
- Llenar y vaciar: de seguro le será más fácil vaciar que llenar un recipiente con sus juguetes favoritos u otros objetos, lo importante es que vaya desarrollando su paciencia junto con sus habilidades.
- Dibujar: durante los 12 y los 18 meses los niños disfrutan mucho de esta actividad. Si bien les cuesta mucho trabajo dibujar figuras que tengan alguna forma, a través de sus garabatos poco a poco irán teniendo un mejor manejo del lápiz para aprender a realizar dibujos con más sentido.
- Apilar, separar y encajar: estas habilidades se adquieren de juegos de puzzles o cubos, y son actividades que disfrutan mucho los niños entre los 12 meses y los 3 años. Los hay de muchos tipos, lo que entrega muchas posibilidades de diversión y aprendizaje.
- Actividades sensoriales de tacto: a los niños les fascina descubrir el mundo que los rodea a través de sus sentidos, por lo que las tareas que involucren un tacto agradable y divertido les proporcionaran mucha información sensorial, además de ayudarles a desarrollar su fuerza y agilidad.
- Patear una pelota a un arco: los pies también son una parte del cuerpo que necesita desarrollo de la motricidad fina. Patear la pelota dentro de un arco puede ayudar a los niños a incrementar sus habilidades, fortalecer sus músculos y mejorar su agilidad.
- Exprimir esponjas o trapos mojados: este tipo de actividades ayudan a fortalecer los músculos de las manos, fundamentales para la motricidad fina. Lo mejor es que este tipo de tareas se pueden acompañar con deberes, lo que sirve para incrementar su confianza.
Si bien todos los niños tienen un desarrollo distinto, y algunos tardan más que otros en adquirir ciertas habilidades, siempre es bueno consultar con un especialista si el niño tiene alguna especie de retraso en actividades que ya debería realizar a su edad de acuerdo a su desarrollo psicomotor, pues detrás puede haber algún tipo de trastorno.
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